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¿Sabes cómo cuidar un albornoz?

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En MásQueToallas nos preocupa el buen estado de nuestros productos. Cuidar un albornoz correctamente no es difícil, solo debes tener en cuenta algunos detalles para no estropear su rizo y seguir disfrutando la suavidad del algodón 100 %.

 

Truquitos para cuidar un albornoz

 

¡Dale un buen estreno!

¿Acabas de comprarte un albornoz de algodón 100 % en MásQueToallas? A partir de ahora salir de la ducha se convertirá en un momento de suavidad absoluta, te lo aseguramos. Sin embargo, aunque estés deseando estrenarlo, te recomendamos lavarlo para quitarle las pelusas tan típicas de los albornoces nuevos.

 

Lávalo correctamente

Para cuidar un albornoz y garantizar su suavidad es fundamental un buen lavado con agua fría, siempre con detergente suave y sin suavizante. Aunque nos guste el olor que deja en la ropa, el detergente en exceso puede apelmazar el rizo y el suavizante reducir la capacidad de absorción de nuestros productos 100 % algodón.

Y ahora, la pregunta del millón: ¿cada cuánto es aconsejable lavarlo? Es cierto que no es necesario hacerlo tras cada uso, pero sí habitualmente. Por ejemplo, cada 3 o 4 usos en tu hogar. Si lo usas para la piscina o el gimnasio sí que te recomendamos lavarlo en cada ocasión.

 

Buen secado: clave para cuidar un albornoz

Evita la humedad y los malos olores extendiéndolo al aire libre, tras cada uso y lavado. Eso sí, para cuidar un albornoz recuerda no exponerlo directamente al sol si no quieres que poco a poco se vaya apagando su color.

Truquito para los amantes del color: puntualmente puedes añadir vinagre blanco en el compartimento del suavizante de la lavadora para mantener vivos sus colores y desafiar al paso del tiempo.

 

El truquito de la secadora

Secar los albornoces por completo en la secadora es un error. Pero si de vez en cuando los pones un ratito en la secadora les darás un extra de suavidad y esponjosidad.

 

¿Quieres plancharlo?

No es recomendable plancharlo para no dañar su tejido, pero si te ves obligado a hacerlo pulveriza un poco de agua sobre él para ablandar su tejido y así será más sencillo eliminar esas arrugas.

 

Llega el momento de guardar

¿Colgar o doblar? En MásQueToallas nos decantamos por la opción de colgar. Además de ayudarte a que se ventile y desprenda malos olores, al colgarlo puedes evitar que se produzcan arrugas pronunciadas. En caso de que no tengas espacio para colgarlo en tu baño, asegúrate de que esté completamente seco antes de doblarlo y guardarlo.

Proceso de fabricación de una toalla

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Las toallas de baño son un complemento indispensable en nuestra vida diaria. Pero, ¿sabéis su proceso de fabricación?

En MásQueToallas nos comprometemos a ofrecer la máxima calidad en nuestras toallas y, por ello, estamos atentos a cada fase del proceso de fabricación. ¡Te lo contamos!

Fabricación de una toalla

La fabricación de la toalla implica un proceso minucioso e industrializado que va desde la recolección y selección del algodón hasta el empaquetado para su posterior distribución.

Después de la recolección del algodón, se lleva a cabo la separación de las fibras conocida como el proceso de desmochado. A continuación, las fibras pasan a la hilatura donde se prepararán los diferentes tipos de hilos y calidades.

Del hilo utilizado va a depender el acabado de la toalla y su calidad.

Ya con los hilos seleccionados y en el urdidor, éstos se preparan para tejer en máquinas conocidas como telares.

Existen dos opciones para dotar de color a las tollas:

  • Toallas lisas de un solo color: Una opción sería tejer en crudo (color natural) para su posterior tinte al color deseado.
  • Toallas de colores: Otra opción sería tejer los hilos tintados con anterioridad. Una vez tejido, se realiza la confección de la toalla.

Por último, llegamos al proceso de empaquetado para su posterior distribución al cliente final.

En MasQueToallas.com sabemos lo que hacemos. Somos expertos en toallas y conocemos todo el proceso de fabricación, lo que nos permite ofrecer la mejor calidad al mejor precio.

Gracias a la alta calidad, nuestras de toallas de rizo de algodón están recomendadas para uso en personas con pieles sensibles y para uso infantil.

Cuida tus toallas 100% algodón

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El algodón es la fibra natural más importante que se produce en el mundo. Nuestras toallas están fabricadas con hilo de algodón puro 100%, sin impurezas, cuyo resultado es una fibra larga, más uniforme y resistente.

Características de las toallas 100% algodón

Las toallas de MásQueToallas transmiten y aportan estos valores que pueden apreciarse en la propia piel en el momento de su uso:

  • Alto nivel de absorción: absorben el agua en un grado superior a una prenda estándar.
  • Aportan un mayor volumen consiguiendo una agradable sensación.
  • Evaporación de la humedad: se secan antes.
  • Suavidad, aspecto agradable al tacto, y brillo natural.
  • Durabilidad: el algodón empleado en la fabricación de nuestras toallas hace que éstas conserven sus propiedades iniciales durante un largo período de tiempo.

Recomendaciones de uso

Las toallas de rizo de algodón que ofrecemos están recomendadas para uso en pieles sensibles y para la piel del bebé.

Cuidados del producto

  1. Separar siempre las prendas oscuras de las claras y de las de color.
  2. Utilizar detergentes neutros, ya que los fuertes provocan la pérdida de color en tus toallas de algodón.
  3. No utilizar lejía.
  4. Aunque el algodón puede lavarse tanto en agua fría como en caliente, hay que tener cuidado con esto, puesto que un exceso de temperatura puede encogerlas y desteñirlas.
  5. Conviene no mezclar en un mismo ciclo de lavadora tus toallas de algodón con ropa o cojines que lleven cremalleras o botones, ya que estos pueden deteriorar el tejido.
  6. No usar demasiado jabón. Un exceso de detergente las endurecerá y reducirá su capacidad de absorción.
  7. Sacudir bien las tollas al extraerlas de la lavadora para eliminar, en la medida de lo posible, las arrugas.
  8. No mezclar sábanas y toallas de algodón en la secadora, ya que las sábanas se secan más rápido. Al ponerlas juntas, puede que las sábanas queden demasiado secas y estén ásperas al tacto o que las toallas no se sequen y se tenga que usar un ciclo extra de secado. Utilizar siempre secadora suave.
  9. Plancha suave.